IDEAS DE JUSTO PASTOR

• Sergio Cáceres Mercado

Ayer se cumplió un aniversario más de la muerte de Justo Pastor Benítez, político liberal y estudioso de la cultura paraguaya. Pertenece a esa primera mitad del siglo XX, en la que militaban en filas del liberalismo grandes intelectuales. Me pareció pertinente extraer algunas líneas, de las miles que escribió, en las que se refiere al partido político que tanto quiso. El Partido Liberal va rumbo a la llanura otra vez, a no ser que realice un golpe de timón profundo. A casi medio siglo de la desaparición de Benítez, acá van unas ideas de cómo pensaba el liberalismo.

– "Un partido es una comunidad de ideales, y no un eslabonamiento de vínculos comunes de dependencia."

– "Los partidos necesitan hoy programas definidos, no vagos preceptos de justicia y libertad. La política ha perdido su carácter genérico para adquirir otro más específico y concreto. La política contemplativa y liberal cede su puesto a una política más radical, que podríamos caracterizar llamándola constructiva. El Partido Liberal necesita renovar periódicamente su ideario político de acuerdo con las necesidades del momento. Esa constante renovación, que es su característica, es, también, la verdadera garantía de su vida y su progreso."

 

– "En pueblos de organización incipiente como el nuestro, no tiene justificación el laissez faire. El Estado ha de concurrir con su ayuda, con su influencia, con su capital y con su autoridad a solucionar los problemas que la iniciativa particular no puede resolver o solo puede hacerlo deficientemente. La intervención del Estado en el Paraguay no es una teoría, sino una necesidad pública."

 

– "Los primeros conductores liberales fueron hombres del pueblo, voceros de ansias colectivas de mejoramiento. Tal es su naturaleza. El Partido Liberal fue fundado para defender a los pobres, a los trabajadores, a la masa proletaria de la ciudad y del campo; para bregar por los atributos que hacen de una comunidad un pueblo organizado, culto y libre, y no una masa bien alimentada, a expensas de su libertad. Es adversario de privilegios y castas."

 

– "A la forma, al esquema político, el liberalismo tiene que agregar como preocupaciones fundamentales el problema económico y la justicia social."

 

– "Solo un gran partido imbuido de su misión, alentado por ideas reformistas, de pensamiento creador y aglutinante y de espíritu combativo, puede colaborar en la creación de ese ambiente depurado. Ninguna revolución o transformación social se han podido hacer sin un pensamiento alentador, sin doctrina."

 

– "El liberalismo es humanista; ya no puede ver, como ocurría en el siglo pasado, en el ciudadano a un elector, sino a un hombre en la plenitud de su vida, que tiene derecho a un mínimo de subsistencia y a la fijación de sus derechos. Para el partido no solo debe existir el elector, sino el obrero, el intelectual, el campesino, el niño, con sus derechos; la mujer como entidad moral y jurídica; el joven, con derecho a la formación y a la cultura."