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HA… CHE RETà PARAGUAY ✓

ESTO PODRIA COPIARSE

De Chester Swann (Paraguay)

Si alguien cree que no hay censura en la actualidad, que me diga si asi como ha sabido todo de Egipto y libia, porque los periódicos y medios no dicen nada de Islandia. En islandia el pueblo ha hecho dimitir a un gobierno al completo, se nacionalizo los principales bancos, se decidió no pagar la deuda con Gran Bretaña y Holanda a causa de su mala política financiera y se acaba de crear una asamblea popular para reescribir su constitución, todo ello en forma pacifica, toda una revolución contra el poder que nos condujo a la crisis actual .He aquí porqué no nos dan a conocer los hechos por años y hasta ahora.

VAMOS AL RESUMEN DE LO QUE OCURRIO

2008,SE NACIONALIZA EL PRINCIPAL BANCO DEL PAIS. La moneda se desploma, la bolsa suspende su actividad, el país esta en bancarrota-2009, las protestas ciudadanas frente al parlamento logran que se convoque a elecciones anticipadas y provocan la dimisión del 1er ministro, y de todo su gobierno en bloque, continua la pésima situación económica del país. Mediante una ley se propone la devolución de la deuda a Gran Bretaña y HOLANDA mediante el pago de 3.500millones de euros, suma que pagaran todas las familias islandesas durante 15 AÑOS AL 5,5X CIENTO DE INTERES .

 

2010 LA GENTE VUEVE A echarse a las calles y solicita someter la ley al referéndum. En enero del 2010 el presidente se niega a ratificarla y anuncia que habrá consulta popular. En marzo se celebra el referéndum y el no paga a la deuda y arrasa con el 93% de los votos. A todo esto, el gobierno ha iniciado una investigación para dirimir jurídicamente las responsabilidades de la crisis. Comienzan las detenciones de varios banqueros y altos ejecutivos. La interpol dicta una orden, y todos, y todos los banqueros implicados abandonaron el país. En este contexto de crisis, se elije una asamblea para redactar una nueva constitución, que recoge las lecciones aprendidas de la crisis. Para ello se basaron en hacer una copia de la constitución danesa. Para ello se recurre directamente al pueblo soberano. Se eligen 25 ciudadanos sin filiaciones políticas de los 522 que se han presentado a la candidatura, para lo cual solo era necesario ser mayor de edad y tener el apoyo de 30 personas. La asamblea constitucional se hizo en febrero de 2011 y presento un proyecto de carta magna a partir de las recomendaciones consensuadas en distintas asambleas que se celebrarán en todo el país. Deberá ser aprobada por el actual parlamento y por los que constituyan tras las próximas elecciones legislativas.

 

HALLOHH C.N.N ¡!!! ALGUIEN ESCUCHO ESTO POR LOS MEDIOS DE COMUNICACION MASIVOS….????

 

NOOOOO, MUTIS EL TEMA ISLANDIA, PARECE QUE NI EXISTE ESE PAIS, QUE CADA UNO OCUPE SU RACIOCINIO PARA DARSE CUENTE DE PORQUE LOS MEDIOS MASIVOS SILENCIAN TODO ESTE TEMA DE ISLANDIA… ESTO PODRIA COPIARSE Y TODO EL SISTEMA COMENZARIA A COLAPSAR …!!!

6 comentarios

Anónimo -

... LOS DISPAROS ENTRE COLORADOS SON REVELADORES

Toda la ciudadanía está en conocimiento de que en las carpas de la ANR hay gente que aprovecha su posición y cargo para beneficio propio, y por ende las luchas para ganar las elecciones internas de ese partido muchas veces son muy reñidas, pero también hasta encarnizadas en ocasiones, para derrotar al eventual contrincante e impedir que otro sea el beneficiario.

Es aquello lo que nos están demostrando de nuevo, con los disparos de armas de fuego que efectúan contra sus adversarios, los seudodirigentes de Santaní, y que posiblemente también es lo que ocurrió en Itakyry, donde murió asesinado un activista de uno de los bandos.

Guido Rodríguez Alcalá -

Primero de marzo

Para honrar a su manera el primero de marzo, la Cámara de Diputados mostró una firmeza digna de los héroes de Cerro Corá: cual tigres y tigresas, yaguaretés y yaguaretesas, diputados y diputadas rugieron al unísono. No en los bordes del Aquidabán, sino en los del Barrio Chino; tampoco para defender la patria, sino el zoquete.

Por absoluta mayoría, por goleada, Diputados rechazó la propuesta de inscripción automática de Patria Querida.

Así que seguirá la contratación de zoqueteros para el TSJE y los partidos políticos. Fueron 17.000 en 2010, y ahora se perfilan entre 2.500 y 5.000 más.

En las inscripciones del TSJE se aplica el principio de menos bulto, más claridad. En 1998, el TSJE tenía padrones limpios. Los padrones se oscurecieron a medida que el TSJE engordaba su planilla con planilleros; terminarán color petróleo si crece el aluvión zoológico.

La propuesta de Patria Querida es razonable. Cuando una persona cumple 18 años, se la inscribe automáticamente en el registro del TSJE, mediante una conexión electrónica entre el TSJE y el Departamento de Identificaciones.

Cuando la persona muere, se la saca automáticamente del registro. La inscripción puede ser muy segura, porque Identificaciones tiene un sistema que permite reconocer a una persona por sus huellas digitales, para evitar las manipulaciones con las cédulas, que se alquilan alevosamente durante las elecciones.

En el sistema de inscripción automática puede constar que, por ejemplo, las personas del barrio X, votarán en la mesa XX.

No hace falta andar peregrinando para saber dónde votar. En caso de duda o de cambio de dirección, se consulta y se tiene la respuesta, porque todo estará bien organizado.

Con la tecnología disponible, las votaciones pueden ser rápidas, baratas y a prueba de fraude. Según el diputado Soler, que presentó el proyecto de inscripción automática, el nuevo sistema podrá ahorrar unos 200 mil millones de guaraníes anuales al Gobierno, o sea al sufrido pueblo paraguayo.

Pero la mayoría de los diputados rechazó la propuesta con diversos pretextos. Uno de ellos fue que el sistema propuesto es muy complicado, y que por eso había que dejarlo para el 17 de marzo. Justamente, si el sistema es complicado, hay que comenzar a tratarlo ahora mismo, para que pueda estar listo antes de las próximas elecciones.

Y esto es lo que no quiere la mayoría de la Cámara Baja, que estuvo a su altura. Lo que quiere es ir al alargue, para seguir contratando operadores políticos y tratar de ganar, si no las elecciones, por lo menos unos cuantos puestos públicos.

Estas maniobras de nuestros hombres públicos ("hombre público", debería significar lo mismo que "mujer pública") me recuerdan la historia de Alberto Fujimori. Fujimori llegó a la presidencia del Perú en 1990. En 1992, disolvió el Congreso y el Poder Judicial, y con eso se ganó el apoyo del 80% de sus paisanos.

A la larga, el golpe de Fujimori fue un desastre, pero nos muestra de qué manera se vuelven impopulares los políticos deshonestos, que allanan el camino a la dictadura.

Benjamín Fernández Bogado -

LOS SONIDOS DEL SILENCIO


Lo sé, es el título de una película antigua con tono diferente a lo que la realidad política paraguaya nos propone, pero, apropiado para describir lo imperceptible para muchos políticos. La gente está harta del uso dispendioso del dinero público, de la arrogancia en las respuestas, del cinismo de muchos y muchas, que diariamente nos explican que ellos son una "casta" diferente al común de los mortales. Y, que nosotros, sus mandantes (sus patrones, sus jefes...), no nos merecemos respeto y menos que rindan cuenta ante nosotros.

Unos sostienen sus equipos de fútbol que bien podrían denominarse "unión planillera", o a una costosa canalla que supera los 17 mil supuestos funcionarios. Con razón, el edificio antiguo del reclutamiento militar no daba abasto.

Había funcionarios hasta en la copa de los árboles, ya que los pasillos habían sido rebasados, pero lo que ahora nos enteramos es de que había muchos más "out of compus" (fuera del edificio), realizando distintos oficios muy diferentes al objetivo para el cual el presupuesto generosamente se había extendido para ellos.

Son más que los policías en las calles, más que los militares en todo el país, la mitad de los maestros y médicos, y nos cuestan tanto como cientos de aulas, una docena de hospitales equipados con tecnología de punta, varias carreteras pavimentadas, puentes construidos y una buena parte de la línea de transmisión de 500 kV.

Esta piñata desvergonzada y ruin es un castigo para este pobre país; es un atraco cometido por el Ejecutivo en complicidad con un Legislativo que mientras proclamaba sus críticas a Lugo, ambos nos mentían en este contubernio para robar las ilusiones de un país pobre y marginado.

Si sumamos además a todo ese despilfarro los viáticos, consultores, agasajos..., tenemos para lanzar un nuevo país con dinero de sobra.

Después nos dicen que ¿el Paraguay es pobre? Sí, pero en recursos humanos y en gente decente en el Gobierno, como Eligio Ayala, sobre quien esta semana se llenaron la boca quienes si el homenajeado estuviera vivo les hubiera dado una sonora bofetada por el cinismo y la caradurez.

Ese hombre tan austero que usaba dos tinteros diferentes para firmar documentos públicos o privados, que pidió que su hermano gemelo renunciara a uno de sus cargos mientras él estuviera en el poder.

Con razón celebraron su ingreso al Panteón de los Héroes cuando en realidad había que sacarlo, airear y proclamar sus ideas en escuelas, colegios, partidos, asociaciones gremiales, cooperativas..., en esos sitios donde la idea de Ayala de un país decente, austero, honesto y eficaz tendría que dar nacimiento a una nueva clase dirigente.

Los que tenemos de representantes son en su mayoría unos sinvergüenzas. Unos canallas desvergonzados que no le temen al pueblo.

Creen que nadie se moverá contra ellos, que nadie irá a las plazas o a las calles para protestar contra este robo, saben que un escándalo tapa a otro escándalo en un país acostumbrado a los cínicos y descarados.

Creen que la falta de memoria juega a favor de ellos. Hay que decirles que así fue también en la Venezuela de Chávez y en el Ecuador de Correa. Lo que se vino después es por todos conocidos: el silencio se hizo furia.

Escuchen legisladores y miembros del Ejecutivo el mensaje que se les está enviando y no lloren exiliados lo que no han podido sostener como demócratas.

Por Esteban Aguirre Barrail -

No hay de queso, nomás de papa

Lucas: -¿Sabes lo que la gente dice de nosotros, Chaparrón?

Chaparrón: -No, ¿qué dicen?

Lucas: -La gente dice que tú y yo estamos locos.

Chaparrón: -¿Que tú y yo estamos locos?

Lucas: -Sí, que tú y yo estamos locos.

Chaparrón: -Ah, eso me recuerda algo. Oye, Lucas...

Lucas: -Dígame, licenciado...

Chaparrón: -Licenciado...

Lucas: -Gracias, muchas gracias.

Chaparrón: -No hay de queso, nomás de papa...

No hace mucho me di cuenta de lo útil que fue ver a Los Chifladitos en mi infancia, producto de la pluma del gran Roberto Gómez Bolaños.

Ya toqué el tema de los cuidacoches o "empresarios de la calle", como los define la concejala Karina Rodríguez. Sinceramente, pensé que nada podría superar dicha estupidez. Sin haber recuperado el aliento, me enteré de una noticia peor. Me refiero al proyecto de ley que propone que los jóvenes formen parte del Registro Cívico Permanente automáticamente al cumplir 18 años, mediante un sistema informatizado entre Identificaciones y el Registro Civil.

Este proyecto pretende disminuir la contratación de operadores políticos, todo un esquema de corrupción que vincula a los partidos políticos con el TSJE (la institución contrató a 17 mil personas solo en el 2010). Mediante este sistema quedarían habilitados 500 mil nuevos votantes y el Estado ahorraría 40 millones de dólares. Suena razonable. Lo irracional es la realidad: el proyecto está en peligro de extinción.

Si bien estamos más que acostumbrados al dudoso resultado de mezclar "política" y "Paraguay", esto ya es una falta de respeto al raciocinio y al pueblo, que lucha por ser un país. Los diputados que votaron en contra del mencionado proyecto de ley son: Artemio Barrios, Ariel Oviedo, Atilio Penayo, Arístides Da Rosa, Blanca Duarte, Carlos Liseras, Carlos Paoli, Carlos Zena, Celso Maldonado, Clemente Barrios, César Garcete, Daniel Fleitas, Édgar Venialgo, Elva Martínez, Eulalio Morel, Fabiola Oviedo, Gustavo Cardozo, Gustavo Mussi, Hugo Velázquez, Héctor Ocampos, Jorge González, Juan Espínola, Julio Mineur, Magdaleno Silva, Mario Morel, Mirta Mendoza, Modesto Salinas, Nelson Segovia, Óscar Escobar, Raúl Estigarribia, Salustiano Salinas, Víctor González, Víctor Ríos y Wilson Dávalos. Ellos representan al pueblo, ellos me representan en la Cámara Baja, motivo por el que les pregunto: ¿Saben lo que la gente anda diciendo de ustedes?

Por Oscar Ayala Bogarín -

Inconsciencia consciente

Sin temor a equívocos, se puede afirmar que la clase política es consciente del daño que está haciendo, pero a nadie importa.


¿Es consciente la clase política de lo que está haciendo con la democracia y con el país?

Hasta hoy no hay un solo político o parlamentario que haya reconocido los abusos que están cometiendo en contra del pueblo; que pida perdón, o rectifique su accionar.

Todo lo contrario, los más se hacen los desentendidos, algunos hacen alarde de prepotencia y otros ensayan justificaciones burdas, absurdas, extravagantes o risibles, pero irritantes para quienes tienen dos dedos de frente.

Ante los desmanes que se denuncian diariamente en la prensa, hay quienes ponen cara de "yo no fui", "yo no sabía", "todos lo hacen", etc.

En medio de este festival de despilfarro, discrecionalidad y deshonestidad, cínicamente salen a hablar de las virtudes de un Eligio Ayala, paradigma de la austeridad, probidad, honradez y celo por la eficacia de la gestión pública.

Avergonzados, deberían guardar sus discursos y, calladamente, adoptar esos legados. Pero sabemos que no lo harán. Seguirán esquilmando a este país, rico en recursos y potencialidades, pero empobrecido en educación, dignidad y valores.

Lo que está ocurriendo hoy en todos los niveles de gobierno y en casi todos los partidos políticos es vergonzoso. Es inadmisible. Hace tiempo que en nuestra política no existen sheriffs y bandidos, policías y ladrones, demócratas y autoritarios. Están todos juntos y revueltos.

La cleptocracia (el gobierno de los ladrones) está institucionalizada y, por si fuera poco, la están perfeccionando. En absoluto les preocupan las necesidades de la gente. En absoluto temen la ira del pueblo. Lo único que les importa es enriquecerse a costa del Estado, que es lo mismo que a costillas del pueblo.

Sin temor a equívocos, se puede afirmar que la clase política es consciente del daño que están haciendo, pero a nadie importa.

Hay que reconocer que muy pocos escapan a la regla. Tratan de hacer algo distinto, pero en medio de las limitaciones que impone el sistema.

Ante esta situación, la sociedad civil no debe cansarse de repetir y exigir que el Ejecutivo vele por la soberanía nacional y luche contra la corrupción administrativa; que los partidos sean garantes de la democracia; que los parlamentarios no se constituyan en agencias de empleos de operadores políticos.

Todos juntos lo que deben hacer es crear las condiciones para promover el desarrollo, alentar la inversión y facilitar la capacitación profesional y técnica para satisfacer las necesidades actuales del país.

Anónimo -

La descarada falta de ética de los políticos que usan al Estado en provecho propio es insostenible

La seudodemocracia en el Paraguay, por acción de los políticos, se convierte en descarado robo al pueblo, no al Estado, porque hace tiempo que se apropiaron de sus aparatos y bienes. Además, abusan de su poder para manejar los asuntos públicos con total discrecio- nalidad. Al mismo tiempo, los partidos y sus representantes solo se sirven de la Constitución y las leyes para "legalizarse" y autoelegirse, pero no para que impere el estado social de derecho, sino para profundizar las desigualdades. El resultado de este reino de la amoralidad es un país atrasado y casi inviable.

Cuando deberíamos encaminar la democracia hacia el desarrollo, comprobamos que solo la hemos convertido en instrumento de corrupción y en un régimen de impunidad para la delincuencia pública.

Valoramos las libertades. Y por eso, aun ante el desencanto de los políticos que se aprovechan del poder para la satisfacción de sus ambiciones egoístas, decimos que al Paraguay solo le queda la opción de institucionalizar la democracia.

Hoy nos escandaliza el cúmulo de irregularidades y abusos de poder falazmente entronizado en dos décadas, consolidando la cleptocracia -el gobierno de los ladrones- que nos legó la dictadura. Al tener el derecho de elegir libremente, debíamos dignificar la política y entender que la democracia obliga a dar pre- eminencia al principio de igualdad.

Pero lo único que hicimos es legitimar la detentación del poder. Facilitar que lleguen allí quienes van a traicionar la voluntad popular. A los que engordan al Estado con la empleocracia y debilitan su soberanía, ya por su incompetencia u oscuros intereses.

En realidad, la falta de una ciudadanía crítica permite que nuestros gobernantes agraven el patrimonialismo. Es decir, el sistema de apropiación de los bienes nacionales. Este sistema es feudal. No tiene nada que ver con la República ni con la democracia.

Ahora tendría que gobernar la Constitución. La República es el gobierno de la ley para evitar la discrecionalidad de los hombres. Pero para que el Estado se rija por el derecho se necesitan gobernantes honorables, inteligentes y capaces. Y un pueblo que ejerza su soberanía para garantizar el bienestar general y rebelarse contra aquellos que, en el ejercicio de su mandato, anulan su confianza y violan la legalidad.

Sin embargo, aquí solo se acude a la Constitución para las periódicas "elec- ciones", pero no para garantizar los derechos de todos a una educación de calidad, a la salud, a la vivienda y a la tierra propia.

Frente a estos derechos es que los políticos y profesionales en función de go- bierno, incluyendo los órganos judiciales, muestran las dos caras deslegitimantes del poder: mala administración y corrupción. Son la moneda de las desvergon- zadas violaciones de la ley y la impúdica falta a la ética de la política.

Si ya es calamitoso que se dilapiden el presupuesto en planilleros y en asig- naciones para los partidos políticos -en un país donde la mayoría de las es- cuelas carecen de pupitres-, los sueldos, sobresueldos y viáticos para los re- presentantes y funcionarios públicos dejan prácticamente al país sin finanzas para inversiones. Pero esta situación revela solamente incapacidad para gobernar y para corresponder a la política como ámbito especial de servicio al bien de la sociedad.

Pero así como nos llegó la democracia, llegará el alba para distinguir y sanear a la República. Como se ahondan las desigualdades, la paciencia se está ago- tando. Ante los reiterados desencantos, el pueblo, o más tarde o más temprano, optará por los mejores.