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HA… CHE RETà PARAGUAY ✓

EL SUEÑO DEL HOGAR DIGNO

Sin lugar a dudas son mayores los pesimismos que  la esperanza de concretar en realidad los proyectos que se esbozan desde la Secretaria Nacional de la Vivienda y el Hábitat SENAVITAT con la asunción de la nueva  titular de  esta dependencia de gobierno la Sra. Soledad Núñez, quien tiene como antecedente el haber estado al frente de una ONG, que con grupos de voluntarios  se encargaban de construir viviendas populares para sectores vulnerables, sobre la base del voluntariado y la autoayuda.  Lo que ahora cambiará ya que la magnitud del problema, las carencias de viviendas exceden hasta las posibilidades de la industria de la construcción de poder hacer frente a estas necesidades en término y forma.

En efecto la indolencia y hasta la actitud delincuencial de las anteriores administraciones de la SENAVITAT hizo que las necesidades se acumularan que el déficit de viviendas crecieran y hoy se  llegue fácilmente a mas de 100 mil casas las que de forma perentoria se requiera para dotar de morada digna a los paraguayos, nos estamos refiriendo solamente a la capital de la republica, si se pensara solamente en la gente del bañado y la chacharita, si a eso se suma el cinturón de pobreza que rodea la capital en las urbes aledañas entonces las cifras crecen hasta niveles alarmantes.

Aparte debemos convenir que existe una gran demanda por el auge de las construcciones en el país, en la zona de autopista – Villa Morra, que hace trabajar al limite  la exigua capacidad que tiene la industria de los materiales de construcción, comenzando por la cementera estatal Valle Mi, que siempre está  con déficit de producción teniendo que importar cemento lo que se tornaría más dramático aun si aumentara a los niveles esperado para satisfacer la demanda de las viviendas populares. Lo cierto es que si esto se pone en marcha dinamizaría grandemente la demanda de mano de obra en el país, muchísimos desempleados accederían al primer empleo en los diferentes oficios que se necesitan para la construcción como albañilería, carpintería, plomería, electricidad, etc.

Sin embargo Soledad Núñez, debe encontrar la forma de romper este pesimismo creciente, comprensible después de tantas promesas incumplidas por malos administradores y gobernantes que solamente de fachadas decían preocuparse por la vivienda digna para los compatriotas, tiene a su favor su juventud y su experiencia en un rubro relativamente pequeño para la empresa presente.  Tiene la magnífica  oportunidad de encarar proyectos que según las esferas oficiales tienen financiamiento y con procesos en marcha, necesitará de un equipo formidable que apuntale los trabajos a realizar,  una gran capacidad de hacer y mucha honradez para transparentar los números de tal forma que tantos connacionales puedan por fin vivir en una vivienda digna.

por Andrés Granje.

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