Económicamente

No es necesario ser economista para entender de economía. Con solo ir a un partido de fútbol ya se pueden comprender algunos conceptos básicos, como el de la oferta y la demanda, por ejemplo.
Si se hacen las simples preguntas: ¿por qué los hinchas pagan el doble por la gaseosa dentro del estadio que afuera?, ¿por qué cuando llueve los pilotos son tan caros?, ¿por qué los precios de alimentos bajan una vez terminado el partido? y ¿por qué las entradas cuestan más en partidos más importantes o decisivos?.
Todas estas dudas tienen una respuesta: el movimiento de la oferta y la demanda.

Dos palabras
El economista Angelo Palacios explicó que “una gaseosa, por ejemplo, dentro del estadio puede vale el doble de lo normal por la simple razón de que hay una menor oferta, ya que afuera uno puede recorrer varias despensas donde comprar, entonces hay una competencia por los precios, mientras que dentro de la cancha los vendedores saben que son los únicos oferentes.”
En los días de lluvia, el pilotín tiene un costo del doble de lo que se puede conseguir en días soleados. La explicación es el aumento de la demanda o de consumidores que desean este producto.

Cuando todos quieren y no todos tienen
“Los días de lluvia todos quieren y no todos venden el pilotín. Además, los vendedores te lo ponen al tiro de la mano. Entonces, la oferta es menor porque son pocos los comerciantes con este producto y la demanda aumenta porque nadie quiere mojarse”, resaltó el economista.
Estos son aprendizajes empíricos, no necesariamente uno debe pasar por uno casa de estudio para poder comprender lo que es la oferta y la demanda.

Santiago Zavattiero