RELACIONES ASIÁTICAS

Regresó  la comitiva del Presidente Horacio Cartes de su viaje oficial a la República de Taiwán China, en donde entre otras cosas participó de la fiesta del doble diez, que conmemora el aniversario de la creación de esta isla país que el gobierno de china continental, uno de los más extensos, poderosos y poblado del mundo, considera aun como la provincia rebelde a la que pretende anexar en cualquier momento devuelta, lo que genera una situación de permanente tensión para la población y el gobierno autónomo de la isla de 36 mil kilómetros cuadrados.

El Paraguay no tiene relaciones diplomáticas directas con China, por razones históricas, primero,  la política “democracia sin comunismo”, instaurada en nuestro país en la época de la guerra fría, por Stroessner, hizo que el dictador clausurara toda actividad diplomática con países ubicados detrás de la cortina de hierro, entonces, denominación dada a los países que adscribían ideológicamente a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, sin embargo después de la caída del Stronismo y luego de restablecer relaciones inclusive con Rusia, Paraguay seguía     precisamente sin relaciones diplomáticas con China, porque una de las condiciones del país continente es que Paraguay debe dejar de tener relaciones Diplomáticas  con Taiwán.

Ha sido una constante que los gobiernos paraguayos solicitaran  y obtengan la cooperación taiwanesa desde la época de Stroessner, esta costumbre no cambio al pasar de los años y los gobiernos, el mismo Fernando Lugo en su momento solicitó y obtuvo la cooperación de la isla, por lo que este viaje de Cartes se incluye en la lista de los tours presidenciales a Taiwan, con una salvedad importante Cartes no fue a pedir la clásica ayuda no reembolsable sino a proponer negocios e inversiones, mostrando el ambiente formidable que existe en el país para facilitar la inversión extranjera, lo cual nos parece un cambio radical y positivo, ya que por fin dejamos la actitud menesterosa de los pedido para proponer negocios conjuntos  que beneficien a ambos países.

Donde nos parece se equivoca de mira es seguir empeñados en hacer negocios con Taiwán mientras el mundo comercia con China Continental con una población superior a los mil trescientos millones de habitantes, con un crecimiento envidiable en la última década que le acerca a las naciones más poderosas del planeta y con quien todas las naciones incluyendo las del primer mundo como Estados Unidos de Norteamérica, Inglaterra, Alemania y Francia negocia por las conveniencias que genera. Qué gran mercado puede ser para nuestras materias primas, entregado en un comercio directo, no con la intermediación que ahora se hace.  El objetivo de Cartes o cualquier otro gobernante paraguayo debe ser establecer relaciones con China Continental y no persistir el relacionamiento con Taiwán.

por Andrés Granje