EL MODELO ECONÓMICO AGROEXPORTADOR DESTRUYE EMPLEO JUVENIL, SEGÚN INVESTIGADOR SOCIAL
Luis Caputo explica la paradoja entre crecimiento económico del 9% y destrucción del empleo en el país. “No hubo cambios significativos a partir del cambio de gobierno ocurrido en abril del 2008 en el abordaje de la problemática del empleo juvenil”, afirmó el investigador y politólogo Luis Caputo, del Centro de Estudios Base Investigaciones Sociales (Base Is), al realizar una breve evaluación en ocasión de la recordación del Día de la Juventud.
Caputo señaló que hay un cambio positivo en la política gubernamental de la actual administración con relación a la política de formación profesional de los jóvenes, desarrollado a través del Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP). Pero aclaró, “Es resaltable este esfuerzo en la formación, pero ni se asoma al problema estructural que afecta a la población joven del país”. Agregó que el Ministerio de Educación y Culto también está haciendo mayor esfuerzo de escolarización secundaria, pero aún es insuficiente, nuevamente por razones estructurales.
El investigador explicó la falta de cambio en la política gubernamental en el marco del modelo económico imperante en el país. “Las proyecciones oficiales estiman un crecimiento del 9% de la economía. Las exportaciones agrícolas, en los primeros seis meses de este año, alcanzaron cifras record. Sin embargo se da una paradoja: sube la tasa de crecimiento económico, el PIB al 9%, y paralelamente hay una destrucción del empleo, lo que principalmente afecta a los jóvenes del campo”.
Caputo amplía diciendo que, con esta paradoja, el “crecimiento” es falso. Señala que este modelo económico, basado en el modelo agroexportador, destruye principalmente el empleo rural, porque al concentrar la tierra, la producción y los beneficios de dicho crecimiento en un pequeño sector económico, desarticula la pequeña y mediana producción familiar campesina, y expulsa a los jóvenes de estas familias hacia las ciudades en busca de empleo, que nunca encuentran, concluyó.
4 comentarios
Anónimo -
CON MOTIVO DEL DÍA INTERNACIONAL DE LA PAZ
21 de septiembre de 2010
Hoy se celebra, como cada año, el Día Internacional de la Paz, un día consagrado a la cesación del fuego y la no violencia. La paz es un bien precioso. Hay que nutrirla, mantenerla, defenderla.
Es por este motivo que, cada año, en el Día Internacional de la Paz, hago sonar la campana de la paz en la Sede de las Naciones Unidas. Y es también por este motivo que, cada día, trabajo en pro de la paz. Actúo como mediador entre antagonistas. Doy la voz de alarma ante las amenazas, tanto las que podemos ver claramente como otras que acechan en el horizonte. Promuevo la tolerancia, la justicia y los derechos humanos, y abogo por la armonía entre los países y pueblos.
Este año, el Día de la Paz está consagrado a los jóvenes. Este mes comienza el Año Internacional de la Juventud. Su tema, diálogo y comprensión mutua, capta la esencia misma de la paz.
Los jóvenes de hoy se sienten cómodos en un mundo diverso e interconectado. Sin embargo, también son vulnerables a las fuerzas del extremismo. Por eso, digo a todos los gobiernos y a nuestros asociados: hagamos más por los jóvenes. Démosles un mundo de paz y tolerancia.
Y a todos los jóvenes les digo: únanse a nosotros. Ayúdennos a trabajar en pro de la paz. Ustedes son impacientes. Ven lo que nosotros, sus mayores, dejamos que siga existiendo, año tras año: la pobreza y el hambre; la injusticia y la impunidad; el deterioro del medio ambiente.
Anónimo -
Ea ⋅ Septiembre 21, 2010 ⋅
El Día de la Juventud que hoy se recuerda no es muy grato para la mayoría de los jóvenes del país. Según datos estadísticos últimos de la Dirección General de Encuesta, Estadística y Censo (DGEEC), alrededor del 60% de la población es menor a 30 años. Por otro lado, 3 de cada 10 jóvenes son de escasos recursos o viven en extrema pobreza, según un informe sobre Desarrollo Humano para Mercosur 2009/2010, publicado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Si tomamos que las últimas cifras sobre cantidad total de población en Paraguay asciende a alrededor de 6.300.000 personas, la dividimos por 10 y éste resultado lo multiplicamos por 3, tenemos que 1.134.000 jóvenes luchan por vivir en medio de la pobreza y la pobreza extrema.
Anónimo -
Ea ⋅ Septiembre 21, 2010 ⋅
La mano de obra explotada por escasez de fuentes de trabajo tiene rostro juvenil. Según un informe sobre Desarrollo Humano para Mercosur 2009/2010, publicado por el Programa para las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), sólo 2 de cada 10 jóvenes del país que trabajan ganan el sueldo mínimo.
El dato revela que los jóvenes son explotados como mano de obra barata ante la escasísima fuente de trabajo generada en el país.
Este porcentaje también muestra que aquellos jóvenes trabajadores que no ganan el sueldo mínimo, sobreviven en las calles limpiando parabrisas de vehículos o vendiendo baratijas en los ómnibus.
Anónimo -
Ea ⋅ Septiembre 21, 2010 ⋅
Además, más de 70.000 terminan cada año la secundaria y no encuentran trabajo. Tomando como promedio los resultados de laseEncuestas de hogares 2008 y 2009, elaborado por la Dirección General de Estadísticas, Encuesta y Censo (DGEEC), existe en el Paraguay alrededor de 644.000 jóvenes de entre 16 y 28 años sin trabajo.
Además, cerca del 80% de los 90.000 jóvenes que terminan el colegio cada año e ingresan a la Población Económicamente Activa, no consigue empleo; porcentaje que equivale a 72.000 jóvenes, mujeres y hombres, que deambulan por el país, principalmente en las ciudades que recepcionan los ejércitos de migrantes jóvenes que de los poblados rurales se dirigen a las urbes en busca de trabajo.
Por otra parte, miles de jóvenes desempleados son ocultados en las categorías del subempleo y empleo. Es el caso de los cuentapropistas, que conforman un contingente de 1.000.000 de personas, dentro del cual hay miles de jóvenes que limpian parabrisas de vehículos y venden baratijas en las calles de las ciudades.