COIMEROS

Un grupo de efectivos de la Policía Municipal de Tránsito de la ciudad de Fernando de la Mora, denunció al Director de Tránsito de esa comuna, ya que según los agentes el superior les exigía que diariamente recaude en la calle, coima de por medio, la suma de 100.000 guaraníes cada uno, destinado al director del área, teniendo en cuenta que son 27 agentes los que salen a la calle es fácil cuantificar cuanto pueden juntar de manera fraudulenta en esa dirección. Ante la negativa de los agentes de cumplir con esta exigencia automáticamente eran cesados de salir a la calle, como castigo. Esto rápidamente fue negado por el titular sin embargo los agentes señalan que tienen grabaciones y pruebas de lo que están denunciando,

Indudablemente, el hecho denunciado es grave y la comuna local como el mismo Poder Judicial debe  extremar recursos hasta dilucidar este caso en la que debe tomar cartas de oficio la fiscalía para investigar pues se trata de una cuestión que daña la imagen de una institución vital como la Dirección de Tránsito de una comunidad como la fernandina que por su cercanía con la capital y por el flujo de vehículos que transitan por sus avenidas y arterias se constituye en principales vías de ingresos  y egresos  de la capital. Aparte se trata de un acto de corrupción muy grave en un campo muy sensible, pues para cumplir con el requisito del jefe los agentes deben vacunar a muchos automovilistas.

Para que la gente entienda no se trata del cobro de multas normales por malos  manejos, imprudencias o  por que los rodados no cumplan con las exigencias que las normas del tránsito establece, recaudación que debe ir a las arcas comunales, y está bien que sea así. Se trata del apriete  que hacen los inspectores y en donde no hace falta entregar boletas o evidencia de lo percibido pues se trata directamente de un pedido de coima, de acuerdo a la gravedad de la infracción cometida, que se reduce en el monto pero que queda en manos de los corruptos sin que la institución pueda recaudar nada, prácticamente no existe automovilista que alguna vez no haya sido víctima de un pedido de coima de parte de autoridades de la Policía Municipal.

Siempre se supo del pedido de coima por parte de los efectivos de transito, se repetían los testimonios de  conductores que mencionaban como se formulaban dicho pedido por parte de los inspectores de transito, Sin embargo que sean los mismos agentes quienes denuncian el hecho mencionando inclusive cuanto se les exige para continuar en su puesto de trabajo, demuestra hasta qué  punto la corrupción daña a la ciudad  ya que nadie quiere vivir en un punto donde la corrupción es la moneda corriente y en donde los agentes municipales no buscan un tránsito más fluido  sino la recaudación personal  o grupal con la mala fama para la institución de los que debieran ser celosos defensores.

por Andrés Granje